El Tempra fue fabricado en Brasil, aunque el motor fue producido en la planta argentina Cormec, que Fiat tiene en la ciudad de Córdoba.
Esta versión 2.0 ie full, tiene un muy buen nivel de equipamiento para un auto de su segmento, y además un muy agradable interior.
Otra virtud que favorece el confort del Tempra es su espacioso interior, con un muy buen acceso al mismo, ya que las puertas se abren casi a 90°.
El Tempra se ve como un auto robusto, al que se lo puede criticar por ser algo aparatoso. Desde el interior, como es un auto de cintura alta, y sumando a que la posición de manejo es elevada también, da la sensación de estar manejando un auto más grande de lo que en realidad es. A pesar de ello, la dirección asistida y la gran agilidad del motor, de inmediato compensan la balanza, haciéndolo muy agradable de conducir.
Para incrementar la seguridad, este Tempra incorporó barras de acero en el interior de las puertas, siendo el primer auto nacional o del Mercosur que las trajo. Como contrapartida, a este rubro lo afecta la carencia de faros rompeniebla y una visibilidad no muy clara, especialmente debido a esa sensación de no conocer los límites externos del auto.
1- Aire acondicionado.
2- Dirección asistida.
3- Columna de dirección regulable.
4- Levantavidrios eléctricos en las cuatro puertas.
5- Cierre centralizado.
6- Autoestéreo con frente desmontable.
7- Espejos eléctricos.
8- Apertura interna del baúl.
9- Antena incorporada a la luneta trasera.