En este costado del mundo, las versiones deportivas de cualquier modelo solo suelen sumar faldones, alerón, tapizado de cuero negro y volante con base plana, para agregar stickers con la leyenda Sport o similar -que incluya letras X, R o S- y pedir un precio más alto. Esta vez hay que felicitar a Renault por traernos el Fluence Sport al que dotó de un 2.0L Turbo, 180 CV y además lo produce en Argentina en lugar de importarlo de Europa.
Desarrollado por RTA, Renault Technologies America, con ingenieros locales, de Brasil, Chile y Colombia, con asistencia de Renault Sport, el brazo armado de la marca detrás del Megane III R.S., el nuevo empuje es acompañado por el chasis cuya manifestación visible son las llantas de 17” Schuss.
Obviamente que al posicionarse como la versión más equipada, incluye todos los componentes conocidos del modelo como ABS, ESP, seis airbags, climatizador bizona, sensores de luz, lluvia y estacionamiento trasero, techo solar y el navegador integrado.
A simple vista parece que, pese a llamarlo Fluence Sport, Renault pensó esta variante como tope de gama, antes que como un radical deportivo. Esto se aprecia en los sutiles toques especiales del exterior entre los que se aprecian los faros xenón y el tapizado en cuero negro, mismo tono aplicado a toda la cabina.
