Antes de preocuparse por las posesiones, el consumismo y las fronteras, John Lennon disfrutaba del éxito del single “Ticket to Ride”, que en 1965 puso a los Beatles en lo más alto de las listas en Inglaterra y EE.UU.. Justo para ese entonces Lennon obtuvo su registro de conducir, hecho que salió en todos los noticieros y ocasionó que las marcas más exclusivas llevaran sus vehículos hasta la puerta de su mansión en Weybridge, donde el Beatle decidió comprar la belleza que ilustra esta nota.
La Ferrari 330 GT tiene un V12 de 4.0L en posición frontal longitudinal, que impulsa las ruedas traseras con 300 CV y lleva al vehículo hasta los 244 Km/h. Por esta joya azul de Maranello, el Beatle desembolsó £ 6.500, equivalente a unos USD 169.060 de hoy en día.
Este vehículo fue usado por Lennon hasta octubre de 1967, y luego de varias peripecias (en los 80´s se lo pintó de rojo y se le quitó su matrícula original) su actual dueño lo restauró y lo dejó en las mismas condiciones con la que conquistó al Beatle de anteojos.
El festival de la velocidad de Goodwood será el marco para que la casa Bohams ponga en subasta a esta pieza motorizada de la Beatlemanía, con un precio de base estimado entre USD 270.000 y USD 310.000.
Si te gustan los Beatles, los autos italianos y tenés una billetera acorde, sin dudas es una oferta que tenés que considerar. Para eso, conocé mejor esta Ferrari en nuestra Galería de Fotos relacionada.