A pesar de que los precios de la nafta no aumentan mucho, en los Estados Unidos ganan cada vez más popularidad los vehículos eléctricos, híbridos e híbridos plug-in entre los compradores. En el caso de las opciones con sistemas híbridos están disponibles en casi todos los tipos de vehículos incluyendo las SUVs. Y también hay que destacar que con el aumento en la cantidad modelos, el mayor número de ventas y las mejoras en la tecnología los precios están en baja, favoreciendo la oferta de este tipo de vehículos.
Otro ejemplo de este boom son los autos eléctricos. En menos de una década los fabricantes han desarrollado baterías más eficientes y motores más potentes que permiten a los conductores manejar distancias más largas y al mismo tiempo contar con un poder sobresaliente. Lejos quedan los 160 Km de autonomía del Nissan Leaf en 2010, hoy multiplicados en el mismo Leaf, los Tesla y el Chevrolet Bolt.
En la misma línea, los híbridos plug-in han tenido una gran aceptación gracias a su modalidad de manejo 100% eléctrico en los primeros 50 Km con el respaldo de un motor de combustión interna en el caso que se requiera recorrer trayectos más largos. De esta forma, pueden pasar días y días sin hacer uso de la nafta para su funcionamiento. Volviendo a los híbridos tradicionales, existen nuevos modelos como el Hyundai Ioniq que entrarán a competir y algunos regresos, como el del Honda Accord Hybrid que después de un paréntesis de un año vuelve a la escena. También la llegada del Highlander Hybrid con un ajuste en el precio promete ponerle picante al mercado.
Por último, no podemos dejar de mencionar a los vehículos de pila de combustible, caso Toyota Mirai y Honda Clarity. Si bien aun está limitada su venta en California ante una limitada infraestructura de estaciones de hidrógeno, todo apunta que esta tecnología será la más popular en un futuro debido a que el tiempo de recarga es de sólo cinco minutos.
