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A que no adivinás de qué estrella de rock fue este Aston Martin DB7

Se subastó una de las tantas obras de arte de Ian Callum, y encima perteneció a una leyenda de la música. Te contamos todo.

A que no adivinás de qué estrella de rock fue este Aston Martin DB7

El Aston Martin DB7 es el modelo que trasladó a la firma británica a la modernidad, y si bien actualmente es uno de los GT noventeros más accesibles, el que te traemos hoy es la excepción a la regla.

El ejemplar que ves en las fotos fue la pieza principal de la próxima subasta de H&H Classics, y no, no se trata de un Aston que estuvo en alguna película de 007, sino que fue propiedad de una estrella de rock, y uno de los referentes de la música.

Resulta que este impoluto Aston Martin DB7 de 1995 configurado con el bellísimo British Racing Green (el famoso "verde inglés") perteneció al mismísimo Elton John.

Actualmente, esta unidad está en inmejorable estado, tanto a nivel exterior como interior, y el tablero acusa ¡23.335 km! Nada mal para un auto de hace 30 años.

Lamentablemente, al ser un DB7 "a secas" y no el "Vantage", no cuenta con el V12 de 4.9 L y 426 CV, pero aun así, este GT 2+2 cuenta con un seis cilindros en línea de 3.2 L que entrega 355 CV y 499 Nm, asociado a una transmisión ¡manual! de cinco relaciones. 

Por otro lado, el habitáculo del DB7 cuenta con elementos como los asientos de cuero, un teléfono Motorola dentro del portaobjetos central, y curiosamente, cuenta con equipo de audio Alpine con dos amplificadores de alta potencia en el baúl, subwoofer entre los asientos traseros y mando a distancia perfectamente integrado en la consola central, todo gracias a un encargo especial de Elton John, quien seguramente quería disfrutar de su último álbum en ese entonces: "Made in England", en un auto hecho en Inglaterra.

El Aston Martin DB7 de Elton John se subastó el 9 de abril en el Imperial War Museum de Duxford (Reino Unido), y si bien no se informó el precio final, H&H Classics estimaba que rondaría entre 23.000 y 27.000 libras esterlinas, una cifra que no está para nada mal si consideramos el impecable estado del vehículo y todas sus características.

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