El automovilismo no es ajeno a las pasiones desbordadas; mucho menos cuando se trata de un piloto argentino en la Fórmula 1. Franco Colapinto lo vive en carne propia y cada vez que sale a la pista con el Alpine es escaneada, amplificada y discutida en redes sociales como si fuera un veredicto final.
El sábado, después de la clasificación para el Gran Premio de España, la revista británica Autosport avivó el fuego: mostraron una imagen en la que destacaban las clasificaciones del piloto argentino en sus tres carreras con Alpine:
- P15 en Imola
- P20 en Mónaco
- P19 en Barcelona.
El mensaje no era explícito, pero la intención era clara: invitar a la comparación con Jack Doohan, a quien Colapinto reemplazó en el equipo. Y como suele pasar, el algoritmo hizo el resto.
Foto: @AlpineF1Team
La reacción en redes, obviamente, no tardó. Principalmente, porque la actuación de Colapinto en la pista catalana se vio entorpecida por una falla mecánica de su auto. Eso inundó las redes sociales de memes que sacaron una sonrisa, pero también hubo insultos y teorías conspirativas. Algunos hasta hablaron de un "boicot interno" orquestado por la familia Doohan.
ARDEN LAS REDES
Foto: Prensa Alpine/Andy Hone/LAT Images.
Tal fue el enfado emergieron teorías insólitas. Algunas cuentas en redes comenzaron a responsabilizar al popular grito de “¡Vamos Nene!”, inmortalizado por el periodista Adrián Puente durante las transmisiones de Fox Sports, acusándolo de ser “mufa”. No, no es broma.
Incluso el actor Emiliano Oberndorfer -conocido por interpretar a un personaje que emula a Colapinto en clave de humor, aprovechando su parecido físico- fue atacado por un puñado de fanáticos que lo “responsabilizaron” de la mala suerte. Más de uno propuso ir a Mar del Plata, donde reside, para “matarlo”.
Todo esto mientras Franco trata de adaptarse al nivel más alto del automovilismo global en un equipo que es totalmente nuevo para él, sin haber tenido pretemporada, sin experiencia en el auto, y con apenas tres participaciones en el lomo.
NO HAY MANO NEGRA, ES FÓRMULA 1
La realidad es simple: son carreras de autos, y los autos, a veces, se rompen, y a veces tampoco son buenos. Tal vez muchos añoran las carreras de Franco en Williams, equipo que conocía como la palma de su mano y que le entregaba un mejor medio mecánico que Alpine.
No nos engañemos: el team que dirige Flavio Briatore no es el mejor equipo, ni tiene el mejor auto. Por eso sus buenas actuaciones este año son contadas con los dedos de una mano. El mismo Briatore se ha cansado de decir que el objetivo es mejorar en 2026 cuando el motor Mercedes les permita dar ese salto de calidad que tanto buscan.
Foto: @AlpineF1Team
Esta nota no es un llamado a la calma tibia. Es un llamado a la inteligencia emocional. Franco necesita que lo banquen. No que lo defiendan a los gritos contra todo y contra todos. Mucho menos que se arme una caza de brujas contra periodistas, medios o compañeros de equipo.
Si hay algo que Franco Colapinto ha demostrado en cada etapa de su carrera es que sabe superar adversidades. Que tiene talento, sí, pero sobre todo que tiene cabeza. Y ese camino, el más largo, también es el más sólido.
No etiquetes a medios para insultarlos. No generes ruido en la cuenta equivocada. Si querés que a Franco le vaya bien, decíselo a él. Etiquetalo. Escribile un mensaje de aliento. Mostrale que del otro lado hay una comunidad que cree. Que no se deja arrastrar por el algoritmo, sino que elige construir. Porque eso, al final del día, es lo único que suma. Lo único que deja huella.
Fuente: Automundo
