Hasta no hace mucho, en Argentina había dos clásicos oponentes en el mundo de los SUV Todoterreno de siete asientos, Toyota SW4 y Chevrolet Trailblazer. Mientras el producto del moño fue perdiendo mercado, en gran parte por las dificultades para importarlo de Brasil, apareció un tercero en discordia: el Ford Everest.
Anticipada a fines de 2024 y lanzada en los primeros meses de este año, la Chevrolet Trailblazer sigue a la S10 en estética, interior, más potencia y caja automática de 8 cambios. Veamos qué tal le sentaron todos esos cambios.
¿Qué tienen en común los tres SUV y las pickus?
Básicamente, los tres productos ofrecen tres filas de asientos y derivan de pickups medianas (Hilux, Ranger y S10), incluyendo la estructura de chasis independiente, pero con distancias entre ejes acortadas y suspensión trasera de eje rígido, resortes helicoidales y brazos de control.
ATENCIÓN: no confundir multibrazo o multilink, normalmente usado para suspensiones independientes con estos esquemas que tienen varios brazos, pero un eje rígido.
El nuevo diseño de la Trailblazer
Básicamente sigue a la S10 con el frontal emparentado con la Colorado, su prima gringa, que incluye faros angostos con DRL y luz LED, grandes colmillos, máscaras negras para rompenieblas chicos, boca alargada y un capot con protuberantes refuerzos.
La única versión de la Trailbalzer que se vende en Argentina es la High Country y eso se manifiesta en el exterior con muchísimo cromo, que va en el protector inferior, parrilla, moldura frontal, retrovisores y más. Otra novedad está en las llantas de 18”.
El resto del exterior parece no tener cambios, solo el marco de las luces LED cambió el marco cromado por uno negro.
Nuevo interior más Chevrolet
Abriendo la puerta, el panorama de la Trailblazer es un 99% igual al de la S10 High Country, y dejo ese 1% por las dudas.
En principio tenemos un nuevo tablero de líneas rectas, plásticos duros pero sólidos, con todo prolijamente unido, decorados en cuerina marrón, molduras diamantadas en tono “arma”, biseles cromados en distintas secciones y algo de negro brillante. El marrón se hace extensivo a los asientos tapizados en cuero.
Un gran cambio, al menos para todos los detractores del volante anterior, está en el nuevo timón con inspiración en el de la Silverado, que tiene doble brazo inferior, decorado metalizado, cuero suave y botones fáciles de usar, además de los controles posteriores de audio.
Dos pantallas en la renovación de la Trailblazer
Siguiendo la nueva tendencia de la marca, que va desde la Montana hasta el Blazer EV, pasando por la Spin, la Trailblazer replica el sistema de doble pantalla de corrido, aunque no forma una superficie plana, ya que el cuadro de instrumentos está hundido dentro de la visera.
Detrás del volante hay una pantalla de 8” a todo color, con gráficas fáciles de leer y buena información, aunque para ver datos como los de la computadora de abordo hay que resignar el tacómetro. El mayor problema no sería ese, sino que para activar esa info. hay que recurrir a la pantalla multimedia, lo cual no es intuitivo y es engorroso.
La pantalla principal es de 11” funciona bien, tiene perilla de volumen, carece de GPS propio y tiene conectividad inalámbrica para Android y Apple además de cámara de retroceso en HD de verdad.
Equipamiento y seguridad en la Trailblazer
En una nota a parte vamos a comparar mejor al todoterreno de Chevrolet con sus contrincantes de Ford y Toyota, por el momento nos limitamos de decir que es la que tiene la dotación más modesta y pasamos a nombrar lo más destacado con:
- Tapizados en cuero
- Climatizador de una vía y forzador independiente trasero
- Encendido y apertura “sin llaves”
- Cargador inalámbrico
- Butaca del conductor regulable eléctricamente
- Control de crucero convencional
- WiFi propio
En seguridad tiene cuatro frenos son a disco y seis airbags, con los cortina que llegan hasta atrás de todo e incluye
- Encendido de luces y Altas automático
- Encendido de limpiaparabrisas automático
- Alerta y autofrenado de emergencia
- Alerta de salida de carril, sin intervención
- Alerta de tráfico cruzado
Podemos agregar el servicio de OnStar a esta lista.
Los siete asientos de la Trailblazer
La fila del medio del SUV / Todoterreno del moño es amplia, permite reclinar el respaldo, tiene apoyabrazos con porta vasos, puertos USB A y C, y las salidas de aire en el techo con su regulador de ventilador.
Los asientos del medio no corren longitudinalmente, pero si se pliegan asimétricamente tirando de una manija para facilitar el acceso a las dos placitas traseras.
Atrás de todo, hasta alguien de 1,85 metros entra, aunque lo vas a escuchar quejarse después de un rato, porque las rodillas van contra el respaldo delantero. Yo, con mi 1,75 ms entré mejor, pero tampoco es el lugar donde prefería pasar mucho tiempo en la Trailblazer.
En la fila de atrás de todo hay distintos porta vasos y cosas, luz y cinturones de tres puntos junto con sus correspondientes apoyacabezas.
Baúl y auxilio en la Trailblazer
Con los siete asientos en funciones, en estos modelos el baúl se limita a ser una mega guantera. Tirando de una correa por respaldo, los dos asientos se pliegan hasta formar un piso liso. También podés plegar la segunda fila formando un área de carga amplia y plana.
Las medidas que tomamos del baúl de la Chevrolet Trailblazer son:
- Largo hasta el respaldo de la primera fila: 1,9 m
- Largo hasta el resplado de la segunda fila: 1,15 m
- Largo hasta el respaldo de la tercera fila: 40 cm
- Ancho en boca de carga: 1,15 m
- Alto hasta el cubre carga: 75 cm
Hay un cubre carga retráctil que se puede sacar y un cajón atrás de todo desde el cual se accede a bajar al rueda de auxilio, que en este caso no es homogénea, pero si de un tamaño respetable.
Así es manejar la renovada Chevrolet Trailblazer
Antes de arrancar, acomodamos la posición de manejo de manera correcta gracias a las regulaciones de altura y profundidad del volante, y las eléctricas del asiento. La visibilidad es todo lo buena que puede ser en este mastodonte, apoyada por retrovisores dignos de un vestidor.
Apretamos el botón y del otro lado se enciende el archiprobado 2.8L cuatro cilindros, 16 válvulas, Duramax, que fue realibrado para entregar 207 CV y 510 Nm. La segunda novedad está en la transmisión automática, ahora de 8 cambios, que conserva la caja de transferencia para poder andar en 4x2, 4x4 y baja.
Ponemos D y salvo el sonido diesel, la Trailblazer se siente más directa, con la caja acoplando y pasando de cambios rápido y fluidamente.
Chevrolet habla de muchos retoques en suspensiones y carrocería, y lo cierto es que no puede ocultar que tiene un chasis independiente, se siente alta y pesada, pero prácticamente elimina las clásicas vibraciones que este tipo de modelos solía enviar por toda la cabina ante irregularidades pequeñas.
Para la dirección también hay anunciados cambios, lo cierto es que la asistencia eléctrica es correcta (por algún motivo pensé que se pasarían al lado ultra blando), y es algo vueltera (desmultiplicada) pero sin llegar a niveles de lentitud o torpeza.
El pedal del acelerador está como muy a la izquierda y el de freno permite buena dosificación, aunque el tacto se pone gomoso sobre el final del recorrido.
La ventaja de la configuración de chasis y carrocería por separado es que, sumado al eje rígido y la doble horquilla delantera, permite que la Trailblazer pase por arriba de todo sin golpes bruscos y dándote la seguridad de ese extra de resistencia. Colaboran las nuevas ruedas en medida 265/60 R18 con un perfil de caucho que no es ni excesivo, si tontamente bajo.
¿Qué tal la performance con esos 7 CV y dos cambios extra? Primero, viaja a 120 km/h reales (125 de velocímetro) con menos de 2.000 rpm, segundo, esto medí en las recuperaciones
80-120 km/h Chevrolet Trailblazer
- En D: 7,1 segundos
- En 4º: 6,6 segundos
Hay que aclarar que no tiene levas al volante, pero permite control manual de la caja mediante la selectora.
Lo mejor es la cantidad de gasoil (Grado 3) que pide a cambio de mover su aquilatada masa.
Los datos de la foto no corresponden a la prueba
Consumos Chevrolet Trailblazer AT8
- Urbano: 10,5 L/100km
- A 120 km/h: 9L/100km
- Tanque: 76L
Obvio que un vehículo de este peso, altura y formato de ladrillo va a consumir, pero son cifras más que buenas las que medimos en la prueba.
¿Alcanza la renovación de la Chevrolet Trailblazer?
Como siempre, la respuesta es personal, poque depende mucho de lo que cada uno pondere más y de su presupuesto.
En este caso te puedo decir que sigue siendo un gran producto, se mueve bien y consume correctamente, le falta equipamiento, más que nada en ADAS, pero el interior te hace sentir que invertiste bien tu plata.
¿Cómo queda respecto de SW4 y Everest? Eso lo analizamos en una nota a parte.
Galería de Test Chevrolet Trailblazer HC (restyling)Ir a la galería
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