El piloto ruso Daniil Kvyat volvió a ser noticia por ser uno de los protagonistas de un singular duelo entre el hombre y la máquina. El ex Fórmula 1 se midió contra un auto de la Abu Dhabi Autonomous Racing (A2RL), el primer campeonato del mundo dedicado exclusivamente al automovilismo autónomo de alta velocidad, y que tiene como objetivo desarrollar, probar y acelerar tecnologías aplicadas a vehículos sin conductor en condiciones reales de competición.
El desafío, que se concretó en el circuito de Yas Marina ante más de 8.000 espectadores, dejó en evidencia el salto tecnológico más grande desde la creación del campeonato. Con la nueva generación del prototipo autónomo EAV-25, las máquinas alcanzaron un rendimiento tan cercano al de un piloto profesional que, por primera vez, la diferencia por vuelta se redujo a poco más de un segundo, confirmando que la velocidad de desarrollo del ecosistema autónomo está acelerando a ritmo exponencial.
DANIIL KVYAT VS. IA

Foto: Prensa A2RL .
La exhibición enfrentó a Kvyat contra el equipo alemán TUM (Universidad Técnica de Múnich), campeón defensor de la A2RL. El formato fue simple: el coche autónomo recibió una ventaja de 10 segundos y el objetivo del piloto fue intentar alcanzarlo en un stint de diez vueltas.
Aunque el propósito no era que Kvyat sobrepasara a la IA, la métrica central era la comparación de ritmo. Allí apareció el dato más relevante del evento: el EAV-25 preparado por TUM registró en su mejor vuelta 59.154 segundos, apenas 1.585 s más lento que el mejor tiempo del piloto ruso. Más tarde, en la carrera entre los vehículos autónomos, TUM marcaría un 58.183, sólo medio segundo por encima del tiempo de referencia marcado por Kvyat durante el día.
El piloto describió la diferencia respecto al año anterior como “el día y la noche”. Durante la edición 2024, los coches autónomos estaban 10 segundos por vuelta por detrás del piloto. En 2025, el retraso se redujo al 1–1.5%, un salto que en términos de ingeniería automotriz representa años de desarrollo comprimidos en apenas 18 meses.
EL AVANCE TÉCNICO DEL EAV-25

Foto: Prensa A2RL .
El EAV-25, creado sobre la base de un chasis Dallara como los que usa la Súper Fórmula de Japón, se convirtió en una plataforma autónoma mediante un stack de sensores y procesamiento que ocupa el espacio donde normalmente estaría el habitáculo del piloto.
La arquitectura técnica incluye: LIDARs de alta resolución con mapeo tridimensional inmediato, cámaras estereoscópicas de largo alcance, sistemas de radar multi-banda para redundancia en frenado y proximidad, unidad de cómputo central con capacidad de procesamiento tipo HPC y software de decisión optimizado para escenarios dinámicos y multi-vehículo.
Los desarrollos 2025 se enfocaron en corregir dos debilidades clave detectadas en la primera temporada: el manejo de situaciones bajo bandera amarilla y auto de seguridad, y la anticipación a vehículos lentos o rezagados en la pista.
El enfrentamiento entre Kvyat y el EAV-25 de TUM demostró que esos problemas fueron ampliamente resueltos.
DÓNDE SE ACERCA LA IA Y DÓNDE QUEDA MARGEN HUMANO

Foto: Prensa A2RL
Uno de los mayores elogios de Kvyat fue la capacidad del coche autónomo de frenar tan tarde como él. La lógica predictiva del sistema permite calcular con precisión la pérdida de carga aerodinámica conforme el modelo ingresa en la zona de frenada, ajustando la maniobra al límite físico del neumático.
Sin embargo, el piloto destacó que aún existe una diferencia perceptible en control de deslizamiento y gestión térmica del caucho. Lo expresó con claridad: “En algunas zonas la IA todavía queda corta”.
El desafío radica en que cada grado de temperatura modifica el comportamiento del neumático, el equilibrio aerodinámico y la adherencia. Ese grado de sensibilidad es justamente donde el margen humano sigue marcando diferencia.
EL TÍTULO DEFINIDO POR UN ERROR DE CÁLCULO…

Foto: Prensa A2RL.
El evento principal de la A2RL, una carrera entre seis vehículos autónomos que entregó 2.5 millones de dólares en premio, mostró por primera vez maniobras de sobrepaso limpias y estratégicas entre máquinas, algo impensado incluso un año atrás.
Tras una largada en movimiento, TUM tomó la punta, pero la italiana Unimore ejecutó un sobrepaso interno en la curva 6 durante la segunda vuelta, considerado el mejor adelantamiento de la historia del campeonato.
Durante diez vueltas, ambas escuderías rodaron a ritmo similar al de Kvyat, hasta que Unimore encontró al coche rezagado de Constructor en la curva 1. El algoritmo calculó un movimiento hacia el exterior exactamente al mismo tiempo que el otro auto eligió la misma trayectoria, generando una colisión que dejó a la italiana fuera de competencia.
Tras bandera roja y reinicio, TUM mantuvo el liderazgo y ganó por segundo año consecutivo, seguido por TII Racing y Polimove.
HACIA DÓNDE AVANZA A2RL

Foto: Prensa A2RL.
En un año y medio desde su creación, la Abu Dhabi Autonomous Racing League se consolidó como un laboratorio real de ingeniería de automoción autónoma. Los datos clave del duelo entre Daniil Kvyat y la IA demuestran que los algoritmos empiezan a operar a un nivel cercano al humano.
El rumbo está marcado: el automovilismo autónomo ya no es una promesa experimental sino un ecosistema en rápido ascenso. Y la edición 2025 de A2RL dejó claro que el margen entre humanos y máquinas ya no se mide en decenas de segundos, sino en centésimas.
Fuente: Automundo