Por lo general cuando, Alemania, Japón y Estados Unidos se enfrentan, el resultado suele ser catastrófico para la humanidad. Sin embargo, en esta ocasión la confrontación es muy diferente, ya que ahora, bajo sus propias filosofías y tradiciones, estos países se confrontan para ver que nación tiene al mejor deportivo de cuatro cilindros. Aprovechando la neutralidad que ofrece México, en Autocosmos.com aprovechamos para realizar este duelo en el Autódromo Moisés Solana.

Por fortuna, los emblemáticos aviones de caza P-51 Mustang (Estados Unidos); Messerschmitt Bf 109 (Alemania) y A6M Zero (Japón) utilizados durante la Segunda Guerra Mundial, el conflicto bélico más grande del siglo XX, cedieron sus lugares en esta comparativa a favor de ser representados por algunos de los deportivos del momento. Es así que llegó el momento de que elijas tu bando preferido: Chevrolet Camaro 2.0 T, Mazda MX-5 RF o Volkswagen Golf GTI.

Los rivales

Chevrolet Camaro 2.0T

Siguiendo los pasos de su archirrival, el Ford Mustang, la sexta generación del Chevrolet Camaro añade a su catálogo una variante impulsada por un motor de cuatro cilindros. Antes de ofenderte, te recordamos que  no es la primera ocasión que un L4 yace bajo el capot de uno de los deportivos estadounidenses más famosos de la historia; pero por fortuna, a diferencia del nefasto y raquítico 2.5 litros de 90 CV que montaba el Camaro Sport Coupé de 1982, el nuevo Camaro 2.0 ofrece unas prestaciones bastante decentes. Esto se debe a que la entrada de gama del muscle car  es impulsada por un  2.0 litros turbo con 272 caballos y 400 Nm de fuerza acoplado a una transmisión manual de seis cambios. En teoría, esta combinación mecánica le permite acelerar de 0 a 100 km/h en torno a los 5,4 segundos que no están nada mal aunque extrañes el sonido del V8 en el proceso.

A esta altura te habrás dado cuenta que el Camaro que ilustra este artículo corresponde a la versión SS, esto se debe a que hubo una pequeña confusión al momento de recoger la unidad de prueba. No obstante, todos los datos e impresiones de manejo que te compartimos corresponden a la variante de acceso propulsada por el cuatro cilindros turbo Aclarado esto, sigamos adelante.

Mazda MX-5 RF

La concepción del Mazda MX-5 retoma lo mejor de los clásicos deportivos biplazas ingleses de los 50s y 60s, pero al mismo tiempo lo dota de la esencia nipona que lo ha llevado a convertirse en el spyder (convertible biplaza) más vendido del mundo. Además, ese toque de alta tecnología, está presente en la recientemente introducida variante RF, que permite que con sólo pulsar un botón pasemos de tener una atractiva coupé de techo duro en cuestión de segundos. En un inicio podría parecer que su motor de 2.0 litros con 155 hp y 148 lb-pie de torque no puede estar a la altura de sus rivales, pero recordemos que una de sus cartas fuertes reside en el bajo peso (ligeramente superior en esta variante de techo rígido) y en una conducción dinámica muy al gusto de los puristas. Un automóvil que reúne en un solo paquete tradición y tecnología.

Volkswagen Golf GTi

Este hatchback resulta la elección obvia para representar a los hoy tan extendidos hatchbacks de corte deportivo, después de todo, es el creador y referente de este concepto. A lo largo de 40 años el GTi ha sabido hacerse de una enorme horda de seguidores alrededor del mundo quienes aprecian el hecho de contar con un vehículo atlético y práctico para el día a día. Se puede asegurar que el actual Golf GTI, cumple al pie de la letra esta fórmula, ya que el desempeño brindado por el 2.0 litros TSI con 220 hp y 258 lb-pie de torque, el cual se acopla a una transmisión DSG de seis velocidades, dibuja una sonrisa en el rostro de quien lo conduce. Un punto que generó opiniones encontradas al momento de su lanzamiento, es que sólo está disponible en carrocería de cinco puertas. Algo muy útil, pero que no fue del agrado de todos los fanáticos de este modelo. Pese a que existen rivales con precios menores y motores más potentes, el Golf GTI continúa como el modelo a seguir en cuando a deportivos de uso diario se refiere.

Frente a frente, rueda a rueda

Como mencionamos en el inicio, el lugar elegido para conocer las capacidades dinámicas de estos deportivos fue el Autódromo Moisés Solana, ubicado en el municipio de Epazoyucan, Hidalgo, México. Este trazado de 1.750 metros representa un duro reto para los autos ya que más allá de sus siete curvas o de su recta de 800 metros, se encuentra a una altitud de 2,426 metros sobre el nivel del mar, afectando principalmente el desempeño de los modelos impulsados por motores aspirados.

Por estricto orden alfabético, el primer bólido en rodar fue el muscle car de Chevrolet. Pasando la impresión de no tener el sonido de un V8, el 2.0T ofrece un desempeño dinámico bastante bueno pese a la existencia del turbo lag. De hecho, podríamos decir que luce mejor plantado que su símil equipado con el V6 y mucha de esa responsabilidad la tiene la transmisión manual de seis cambios que luce unos cambios bien escalonados. No es el que mejor se mueve dentro de este autódromo, pero entrega de un manejo muy sólido y agradable a los ojos de los entusiastas. ¿Pena por manejar un Camaro de cuatro cilindros? Para nada.

El segundo deportivo en subirse al cuadrilátero fue el representante nipón, el Mazda MX-5 RF. En verdad resulta reconfortante que este pequeño biplaza sea tan ágil y comunicativo aún a pesar de que en esta versión la transmisión manual fue sustituida por una automática convencional de seis relaciones, cuyo funcionar es razonablemente rápido, pero lejos de lo visto en las robotizadas de doble embrague.

Como era de esperar, el motor atmosférico sufre al momento de acelerar a fondo, siendo el más lento de los tres. Ni que decir del tiempo que toma recorrer la recta principal, ya que en ese lapso tenemos el plazo necesario para tomar un respiro y prepararnos nuevamente para entrar en el lugar donde mejor se defiende y entrega más adrenalina: las curvas. Es en este ambiente donde el pequeño guerrero saca sus dotes ninja y se muestra muy ágil debido a que cuenta con un chasis altamente pulido, un bajo centro de gravedad, propulsión trasera y una dirección fidedigna. Aquí conviene sacar el máximo provecho con las levas de cambio para olvidarnos de la aparente falta de potencia del propulsor SKYACTIV.

Por último, pero no por ello menos importante, entra en escena el compacto deportivo por antonomasia, el Volkswagen Golf GTI. A diferencia de las entregas anteriores, la séptima generación es un producto más refinado y cómodo, pero no por ello pierde ese toque deportivo que tanto gusta ya que al momento de someterlo al castigo riguroso ostenta un chasis noble, altamente capaz para abordar las curvas con grata rapidez.

Un apartado que agrada es el torque del propulsor, ya que la transmisión DSG de sexta, además de ser muy rápida, trasmite con eficacia los 350 Nm de torque a las ruedas delanteras, permitiéndole al compacto alemán acelerar con singular eficacia. Punto de mención aparte merecen los frenos que resistieron el tormento al que fueron sometidos.

Y el ganador es...

Al poder enfrentar y manejar tres maneras diferentes de concebir un auto deportivo alrededor del mundo, francamente sería injusto definir un vencedor absoluto. Por un lado, el Chevrolet Camaro tiene ese encanto que sólo un muscle car ofrece, pero lo traslada a un producto más sensato y útil que sus contrapartes V8. Un deportivo estadounidense de cuatro cilindros que además de atractivo, es relativamente eficiente en el apartado de consumo de combustible. Entre los puntos negativos a resaltar está el hecho de ser el menos ágil debido a sus mayores dimensiones exteriores y peso.

Por su parte el MX-5 RF se presenta como el deportivo que ofrece las sensaciones más alegres al volante. No será el más rápido, pero tiene un estilo encantador, se maneja excelentemente bien en zona de curvas y tiene fama de ser uno de esos deportivos que duran toda la vida gracias a la elevada fiabilidad. En el lado contrario está la falta de velocidad.

Por último, el Volkswagen Golf GTI es sin duda el auto más balanceado entre desempeño y practicidad. Probablemente la carrocería de cinco puertas no sea la más atractiva y algo similar pasa al en su manejo, pese a ser altamente efectivo por momentos es demasiado refinado.