Cambio en la cúpula de Mitsubishi Motors Corporation: luego de 15 años como presidente y casi 50 en la compañía, Osamu Masuko renunció a su cargo de forma inesperada, aduciendo problemas de salud. Ante la sorpresiva decisión, la empresa japonesa decidió que Takao Kato, miembro de la junta, director ejecutivo y CEO de Mitsubishi, cubra temporalmente las funciones de Masuko, quien de todas maneras continuará en la firma como asesor especial.
Desde su ingreso a Mitsubishi en 1972, Masuko ocupó diferentes cargos, entre los que destaca la vicepresidencia de la división de negocios de vehículos automotores, la presidencia del consejo, dirección general y presidencia. En este último cargo -que ejercía desde 2005- cambió el rumbo de la marca, lo que incluyó la llegada de la marca al mercado de los vehículos eléctricos e híbridos plug-in, así como la expansión de la producción y ventas en el sudeste asiático.
Masuko era el último líder de alto nivel que quedaba después del escándalo de Carlos Ghosn, el expresidente de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi que fuera arrestado por primera vez en noviembre de 2018. La marca decidió que siga siendo parte de la empresa con el fin de aprovechar al máximo su conocimiento y experiencia.
